miércoles, 29 de abril de 2015

La Pronunciación

¿Te has preguntado alguna vez por qué, a pesar de hablar el mismo idioma, un argentino no pronuncia igual que un español ni que un mexicano? Para pronunciar correctamente necesitamos aprender a articular los fonemas bien; pero estos no se articulan siempre igual, pues depende de la persona que los pronuncie y de la posición que ocupen en la cadena hablada.

La ortología es el arte de pronunciar correctamente los sonidos del idioma y, por extensión, de hablar con propiedad, utilizando las palabras adecuas.

seseo

¿QUÉ NORMAS DEBEMOS SEGUIR SI QUEREMOS PRONUNCIAR BIEN?

El sistema fonológico español no ofrece excesivas dificultades en cuanto a su articulación. No obstante, conviene recordar algunas peculiaridades de los fonemas y ciertos errores que hemos de evitar:

/b/

Se representa con tres letras, b, v y, excepcionalmente, w.

Cuando el fonema /b/ ocupa el final de una sílaba, es incorrecto cambiarlo por /p/: /abdómen/, no */apdómen/.

Los grupos abs, obs, ubs, en la lengua oral, tienden a perder la b, pero esta se mantiene en la escrita por influencia culta: abstracto, obstáculo, subscripción.

/z/

Es representado por las letras c (ante e, i) o z (ante a, o, u). En gran parte de Andalucía, Canarias y casi toda Hispanoamérica, este fonema se pronuncia como /s/: /kabesáso/ (cabezazo), /sársa/ (zarza), /ejersísio/ (ejercicio). Es lo que se conoce como seseo.

/ch/

Aunque en la escritura está compuesto por dos letras, este fonema tiene un único sonido y como tal lo hemos de pronunciar: chochez, achicharrar, cuchichear.

/d/

En las terminaciones -ado de los participios, en España, a veces se suprime el fonema /d/, en el lenguaje coloquial: */termináo/ por terminado, y, en el vulgar, en las de los participios en -ido: */partío/ por partido. Estos usos son incorrectos: en un lenguaje cuidado, la d debe pronunciarse siempre.

Tampoco es admisible el cambio del fonema /d/ por /z/ o /t/ que hacen algunos al decir, por ejemplo, */virtúz/ o */virtút/ por virtud; ni por el fonema /r/ cuando debemos utilizar la forma imperativa y no la del infinitivo: */bailár/ por bailad o */komér/ por comed.

/g/

Es el que escribimos con las letras g (ante a, o, u): gato, goma, gusano; gu (+ e, i): albergue, guinda, guitarra; g (+ consonante): gladiolo, esgrima; o como final de sílaba: diagnóstico, ignorante.

Cuando el fonema /g/ va seguido de u + e, i y la u ha de tener sonido, es obligatorio el uso de la diéresis (¨): cigüeña, vergüenza, pingüino.

/j/

Es el fonema que gráficamente escribimos como g (+ e, i) o j: agenda, colegio, espejo, granjero, juguete.

/k/

Representamos este fonema como c (+ a, o, u), c (+ consonante), k y qu (+ e, i). Cuando la letra c va delante de una consonante, es incorrecto pronunciarla como /z/, hemos de hacerlo como /k/: inspector (/inspektór/), acné, inyección.

/ll/

Es un único sonido representado con dos letras: caballo, lluvia, muelle. En muchas zonas de España e Hispanoamérica se pronuncia como /y/; es lo que se llama yeísmo: /muráya/ (muralla); /obíyo/ (ovillo).

/p/

Las palabras que empiezan por ps-, en la lengua hablada, suelen perder el fonema /p/, aunque se mantiene en la escrita: psicólogo, psiquiatra, psicópata.

Igualmente tiende a debilitarse en la lengua oral el fonema /p/ en el grupo -pt- de palabras como septiembre, séptimo, etc.

Algunos convierten /p/ final de sílaba en /z/, en palabras como reptil (*/reztíl/), adopción, egipcio; es incorrecto.

/rr/

Es el sonido vibrante múltiple que aparece a principio de palabra: racimo (/rrazímo/), reja; entre vocales: parra, torre; y tras las consonantes l, n, s: alrededor, enredar, desratizar.

/s/

En algunas partes de Andalucía el fonema /s/ se pronuncia como /z/: /azezíno/ (asesino); es lo que se llama ceceo.

/t/

La t al final de sílaba a veces se pronuncia incorrectamente como /z/: */fúzbol/ por fútbol; */ézniko/ por étnico.